
De vuelta de tierras belgas, con la sensación de nuevo de ser extremadamente afortunado al poder disfrutar de momentos en los que conoces gente especial que te da energías para seguir adelante, te recuerda que eres un privilegiado por poder hacer lo que haces y te contagia su ilusión por el mundo del cómic.
Umhn…Hablando de contagio… en un principio íbamos a ir
Kenny y yo el fin de semana a hacer dibujines, pero un gripazo brutal hizo mella en el contingente y al final sólo pude ir yo. Conocí al fin a
Bernard, que a pesar de lo dura que fue su semana anterior, se desvivió porque todo fuera perfecto, y lo consiguió, sin duda. Fue un placer conocerte
Bernard, a ti y a
Valérie, muchísimas gracias por todo, sois los dos muy majos!

El viernes estuve con
Dominique y su equipo, haciendo
dibujines en un banco (sí, eso he dicho: un banco). Y estuve dibujando nada más y nada menos que con dos señores que resultaron ser:
Bernard Godi y
Gos.
Increíble.
Esos son los momentos a los que me refiero, me siento de lo más afortunado cuando puedo dibujar junto a autores cómo estos, cómo cuando dibujé en
Avilés con
Crisse al lado y
Miguelanxo Prado enfrente…. Te sientes feliz y ya está.
Fue especial sobre todo tener a
Gos ahí mismo. Su
Le Scrameustache es una de las series que recuerdo disfrutar de niño tanto! o Los pitufos en los que también participó como asistente! Bouf! Es una sensación tan de

felicidad, estar ahí al lado dibujando también… y no sólo al lado, hay una cartulina en una habitación de una niña de 10 años en la que hay un dibujín mío junto a uno de
Gos!!!!
A ver si ahora que
Glénat va a reeditar
Le Scrameustache lo podemos ver por aquí...
El sábado estuve en la tienda
500 Héros en
Wavre que lleva
Pierre. Otra vez, todo genial, me hinché a dibujar Kookaburras y a disfrutar de la compañía de
Raphaël, y de un montón de niños de uno-dos años que no sé de dónde salieron. Mola sobre todo entrar en la tienda y ver todas las novedades de franco-belga por todos lados, con sus portadas tan chulas, y no tener que buscar la estantería del fondo para ver los lomos de las míseras colecciones que salen en España. Por cierto, los tíos cachitas en calzoncillos y embutidos en banderas terroristas, estaban bien escondiditos. Donde no molestaban demasiado.
Y ya está, unos días geniales disfrutando de gente genial, tebeos geniales y dibujantes extraordinarios. Poco más que añadir.
Música del título: Misfits. I turned into a martian.